El suceso ya ha sido bautizado como "The Snappening" en el reconocido foro anónimo, en referencia a los recientes escándalos de filtraciones de fotografías personales de celebridades, aunque en esta ocasión la filtración desde Snapchat sería de personas común y corrientes.
Esto habría sido posible porque hackers lograron ingresar a las bases de datos de un cliente de Snapchat desarrollado por terceros llamado Snapsave, el que habría estado recolectando cada foto y video enviado a través de la aplicación durante años.
Esto habría entregado acceso a unos 13GB de imágenes privadas de Snapchat que los usuarios creían que se habían eliminado. Eso sí, también afirman que pudo haber sido mediante el hackeo a Snapsaved.com, un cliente basado en la web de Snapchat que cerró hace unos meses atrás. La empresa afirmó en un comunicado que:
Podemos confirmar que los servidores de Snapchat nunca fueron hackeados ni tampoco fueron la fuente de estas filtraciones. Los 'snapchatters' fueron víctimas del uso de aplicaciones de terceros para enviar y recibir 'snaps', una práctica que tenemos expresamente prohibida en nuestros términos de servicio precisamente porque compromete la seguridad de nuestros usuarios.
Continuamente monitoreamos el App Store y Google Play para encontrar aplicaciones ilegales de terceros para así removerlas.
Por lo que parece, muchos vivirán en carne propia lo que sintieron las víctimas de The Fappening. Debo advertirles que lo peligroso de buscar esas imágenes es que dada la enorme popularidad de Snapchat entre los jóvenes norteamericanos, es muy probable que entre las imágenes y videos exista material con menores de edad, por lo que está el riesgo que termines descargando contenidos pedófilos que te puede acarrear muchos problemas.
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