A tí Madrecita!

Hoy es día de las madres, en todo el mundo, o casi todo el mundo. Pero en México, es especial el que no lo festeja es por que no tiene madre. Para variar y no perder la costumbre la mayor parte de mi familia nos reunimos a festejar este día, generalmente lo hacemos saliendo a comer a algún lado.

En esta ocasión asistimos a un buffete, en un hotel fresón. Esta idea surgió desde antes, por lo que prudentemente hicieron la reservación para que no hubiera problemas en la entrada, ya que a más de 100 familias se le ocurre ir allá para festejar.

El día llegó y la hora también, fuimos y llegamos al hotel, lo curioso fue que la comida sería en El Salón Imperial, debido a la gran cantidad de personas que se esperaban. Eran las 12.30 y ya había alrededor de unas 50 personas o unas 10 familias esperando en la entrada ya que no dejaban entrar a nadie aún porque el buffete del desayuno aún no terminaba y debíamos esperar a que saliera el último comensal para poder ingresar.

Y así pasó una hora la gente llegaba y llegaba: las familias, los abuelos, los nietos, las madrecitas, las madresotas y las mamacitas continuaban arribando, el piso, el espacio, el aire y los escalones que hacían las veces de reposets, empezaban a escasear. Los ánimos, la desesperación, la impaciencia y sobre todo el hambre se incrementaban de manera geométrica.

Se supone que la hora de entrada ya había llegado, pero aún nadie estaba autorizado para pasar. Varias personas se arremolinaron en la puerta, escena que pareciera sacada de una manifestación de globalifícos tratando de entrar a la cumbre del G8. Por fin salió el Jefe de Meseros, Chencho, para calmar a la multitud embravecida, empezó a nombrar las familias según las reservaciones, pero la voz de Chencho a sus más 50 años ya se notaba desgastada por lo que la misma multitud ayudó a Chencho a nombrar las familias, aunque no era del todo agradable escuchar las diversas voces y tonalidades de algunas señoras.

Y al fin, después de varios:
yo-"Me da permiso, señora"
ñora- "¿Para qué si no puedes pasar?"
yo- pensando-(no!, ya que sus más de 100 kg me lo impiden!) "Me da permiso de pasar, ya me nombraron"
ñora-haciéndose pendeja que no me escuchó-
yo-"Señora, me permite pasar, ya me nombraron, ya entró mi familia"
ñora-............................-no hay respuesta-(seguramente pensado- Para que quieres pasar, si ni vas a comer nada, estás todo flaco, mejor paso yo, yo si voy a desquitarme con el buffete)
yo-"Señora, me da permiso de pasar"
otro señor buen pedo-"Señora déjelo pasar, a él ya lo nombraron"
la ñora retiró su enorme cuerpo de la entrada y por fin pude pasar.

Después volví a ver la ñoraquenomedejabapasar con 4 platos, lo cual me causó un poco de repulsión.

Y así pasaron unas 3 horas, disfrutando la comida y festejando, escuchando música y así.....

Bueno ya basta de esto.

Bye

-una foto para la ocasión-